Iglesias en Cuba exigen al régimen revertir dolarización de internet

Miembros de la Iglesia Cristiana Pentecostal de Cuba, en una imagen de archivo. (@facebook.com/icpcuba)

Líderes e instituciones religiosas de diversas denominaciones han expresado su preocupación por el impacto de las nuevas medidas del monopolio estatal ETECSA sobre los servicios de internet, en un país ya golpeado por múltiples crisis.

Diferentes denominaciones cristianas en Cuba alzaron su voz en los últimos días para condenar la situación de pobreza en que está sumido el pueblo e instar al Gobierno a frenar la galopante crisis y derogar el "tarifazo".

La Iglesia Evangélica Pentecostal de Cuba (Asambleas de Dios) exigió al régimen la supresión de la medida, anunciada por la Empresa de Telecomunicaciones (ETECSA), de dolarizar los servicios de internet, que afecta “a toda la familia cubana”.

“Como iglesia arraigada en los principios de amor al prójimo y justicia para los vulnerables, expresamos nuestra profunda preocupación ante las recientes medidas que encarecen el acceso a servicios de telecomunicaciones, que ponen más cargas de las que ya vivimos”, dijo a Martí Noticias el Superintendente de las Asambleas de Dios en la Isla, Moisés de Prada.

En un comunicado publicado el sábado, la institución cristiana denunció que su feligresía, formada por “amas de casa, obreros, campesinos, estudiantes, niños y ancianos retirados” considera “desacertadas” las normativas de ETECSA anunciadas el 30 de mayo.

La denominación cristiana exhorta a las autoridades a librar de una penuria adicional a la ciudadanía, que, asegura, solo agravará el estado de la nación.

“Es muy importante la declaración de las Asambleas de Dios de Cuba porque esta es la denominación evangélica más grande de dentro de la Isla y además es una denominación religiosa legalmente registrada”, señaló el pastor protestante Mario Félix Lleonart, asentado en Washington, DC.

“Esta declaración está pensando en la feligresía, está diciendo que el fenómeno que está afectando a los estudiantes universitarios no es exclusivo de ellos, sino de toda la sociedad cubana”.

La declaración de las Asambleas de Dios se suma a otras manifestaciones de inconformidad provenientes de diferentes denominaciones religiosas “en espera de obtener una solución que traiga sosiego y paz”.

Lleonart aplaudió que, por primera vez en la historia, los argumentos de las Asambleas de Dios, acerca de la pobreza del pueblo cubano coinciden con los de otra denominación:

La Iglesia Presbiteriana Reformada en Cuba, enfatizó en un comunicado del 2 de junio que las apelaciones del gobierno de Miguel Díaz Canel a la “resistencia”, la “resiliencia”, la “creatividad” y la “confianza”, han pasado a ser “fórmulas irrelevantes para el pueblo”.

“La incoherencia del discurso oficial se hace cada vez más evidente cuando hoy, por ejemplo, tantas familias viven con temor por sus casas en peligro de derrumbe mientras se erigen frente a ellas enormes hoteles como fantasmas inertes y arrogantes rascando el cielo”, subrayan en su nota de prensa.

“Estas iglesias, las dos legalmente registradas, son muestras de dos maneras peculiares de profesar la fe. Digo esto porque la Iglesia Presbiteriana Reformada en Cuba ha tenido una participación muy activa en el Consejo de Iglesias de Cuba, no así, las Asambleas de Dios que forman parte de la Alianza de Iglesias Evangélicas Cubanas”, indicó Lleonart.

“Me alegra muchísimo que estas dos denominaciones, con dos tradiciones diferentes, hayan levantado la voz por el pueblo cubano. Esto es una señal muy importante en el ámbito religioso cubano y yo considero que, en un momento como este, ninguna iglesia, de ninguna manifestación de fe, de ninguna tendencia debería quedarse en silencio”, puntualizó.

La Red Ministerial Restaurando Vidas, de Trinidad, Santi Spiritus, patentizó, en redes sociales, su respaldo a la declaración de las Asambleas de Dios.


Del mismo modo, Abdiel Morfa, Vicepresidente de la Convención Bautista de Cuba Occidental, se unió al reclamo, aunque aclaró que es “a título personal”.

“Eso afecta toda la vida de la sociedad, de nuestras instituciones, no solo las universidades del país en general, de la inteligencia general, sino los seminarios que son afectados porque usamos la vía online para enseñar”

“Nos unimos al reclamo de que reconsideren y vuelvan a ajustar un precio real que todo el pueblo en general pueda pagar y mantener su internet”, concluyó el representante de la Convención Bautista de Occidente.